Desde el Servicio de Acción Cultural del Ayuntamiento de València, se nos encargó el rediseño de la marca de la Red de Bibliotecas, las acciones comunicativas de dicho cambio y la señalética para las 33 bibliotecas que la componen.

El problema:

La necesidad de la renovación de la imagen venía justificada por el ánimo de dar a conocer la evolución de dichos espacios que pasan de ser “catedrales del silencio” a espacios vivos y cambiantes; espacios donde estar y hacer actividades con el ánimo de convertirse en una parte activa de la comunidad, un agente de cambio.

La solución:

La biblioteca, como tercer lugar, es así la plaza pública donde refugiarse, disfrutar del ocio o trabajar.

Por todo ello, se destacó la B entre cuatro corchetes que la delimitan en un espacio como símbolo principal de este nuevo concepto y que va adaptándose según a la pieza que se aplica.

La tipografía utilizada es de la familia Graphik, una tipografía amable que responde a la necesidad de dotar al logotipo de cercanía.

Los colores utilizados, el blanco y el pantone black 6C para el logotipo y un amarillo puro complementario para destacar titulares en diversas piezas corporativas y de comunicación como guiño a la actividad de estudio, actividad que se mantiene en este nuevo ciclo.

En cuanto a la campaña de comunicación, el objetivo es hacer llegar a la ciudadanía el nuevo concepto de bibliotecas así como todas las nuevas actividades que se darán en ellas.

Créditos:
Año: 2018
Cliente: Ayuntamiento de València, Servicio de Acción Cultural
Sector: Administración Pública
Disciplina: Identidad, Comunicación
Fotografía proyecto: Alba G. Prado
Proyecto en colaboración con The Graphic Bureau

Premios:
Proyecto finalista Premios ADCV. Logotipo. 2019
Proyecto finalista Premios ADCV. Imagen Coordinada. 2019

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